En sus dos picos se encuentran la Capilla de San Jorge del siglo XIX, un teatro y un restaurante. El nombre también se refiere al vecindario residencial que hay inmediatamente debajo del este de la colina.
La colina es un destino turístico y se puede subir por el funicular de Lycabettus. Es un funicular que sube la colina desde una terminal inferior en Kolonaki (la estación de ferrocarril se puede encontrar en la calle Aristippou). Lycabettus aparece en varias leyendas. Las historias populares sugieren que alguna vez sirvió de refugio para los lobos (lycos en griego); y posiblemente ese es el origen de su nombre (significa «al que pasean los lobos»). Otra etimología sugiere un origen pelasgo, pre-micénico (lucabetu = colina mastoidea).
Mitológicamente, Lycabettus se atribuye a Atenea, que lo creó cuando dejó caer una montaña de piedra caliza que llevó desde la península de Pallene para la construcción de la Acrópolis después de que se abriera la caja que contenía Erichthonius.
La colina tiene un gran anfiteatro al aire libre en la parte superior, que ha albergado muchos conciertos griegos e internacionales.
Visita turística al Monte Licabeto
El metro nos deja bastante lejos del funicular para ascender el Monte Licabeto. También podemos subir andando e incluso en coche. Para llegar hasta la entrada al funicular, la mejor opción es coger la línea de autobús 060. Esta línea tiene una parada justo enfrente. El precio del mismo es de 7 euros ida y vuelta, 5 euros un trayecto.
Abre todo el año a las 9 de la mañana y cierra a la 1:30 de la madrugada. Las visitas nocturnas siempre son aconsejables, aunque durante los meses de invierno es posible que cierre con anterioridad. Los trenes salen cada 30 minutos, frecuencia que se verá reducida hasta los 15 minutos si es hora punta. Finalmente, el trayecto se hace en aproximadamente 3 minutos.